Por qué llamarlos “circular” si son temporeros
Los creadores de la neolengua no descansan. Ya lo escribió aquel gran filósofo que fue Peret: "Si eres tan inteligente, que nadie puede entenderte, enfadarte con la gente no sirve de na'". Por ello, el gabinete de neolengua de la Moncloa no se enfada, solo nos envía a la fachosfera, mientras enriquece nuestro lenguaje.
Los mismos productores de "no es concierto, es financiación singular" presentan ahora, en el mercado lingüístico, un nuevo éxito: el "inmigrante circular". O sea, el temporero, de toda la vida.
Sánchez ha encontrado el secreto, ahora, que el malvado capitalismo inventó hace décadas: vienes, recoges la fresa o la uva, te deslomas a precio de ganga y te marchas. Qué grande es ser de izquierdas en estos tiempos de neolengua, no como antes que llamábamos a las cosas impropiamente.
En su viaje para librarnos progresistamente de la inmigración, y no como los fachas peperos que no quieren que vengan quienes tanto necesitamos, ha acordado en la gira africana, esta vez sin Begoña, por si acaso, acuerdos de "flujos circulares" de inmigración. Es decir, temporeros que vendrán en barcos o aviones pagados por España, harán su trabajo agrario y luego se irán…o quizá no, que nunca se sabe.
La propuesta tiene algunas sombras. Por ejemplo, no incluye a Marruecos, de donde salen la mayoría de las pateras. No se refieren a los exilados de las guerras de Mali, por un poner, u otras, que llenan los cayucos y aeropuertos. Pero, sobre todo, no tiene nada que ver con la crisis migratoria.
Perdón que les moleste con números: en España hay, en estos momentos, unos seis cientos mil (600 mil) inmigrantes irregulares que no han ido a la agricultura, precisamente.
El número de activos en el sector primario en el segundo trimestre de 2024 es de 893.400 personas, habiendo disminuido en 1.100 personas (-0,12 %) respecto al trimestre anterior, situándose un 1,85 % por debajo del año anterior, es decir, 16.800 activos menos. El número de ocupados es de 772.000 personas. Habiendo 121 mil parados.
Es cierto que en junio suele descender esta población. En el primer trimestre, la población activa era de 893 mil personas en el sector primario, es decir un 16,5% menos que hace un año. Si sumamos la industria agroalimentaria, el número de activos no superará el millón y medio.
Es decir, la población activa y ocupada en el sector primario está descendiendo dramáticamente. Pedro Sánchez propone, ni más ni menos, que se contrate a un 20% más de población activa, Visto lo visto, más parados.
Además de un descenso de la productividad agraria en España. El valor de la producción ha aumentado el último ejercicio en apenas un 3%, no debido a mayores producciones sino a aumentos de precios y caída de costes asociados a las caídas de algunas producciones. Por cierto, debido a competencia de países que envían inmigrantes, de Marruecos a Tunez.
Los 600 mil inmigrantes no regularizados que viven en España ni viven ni van al campo. Están en las ciudades grandes e intermedias. A España se le viene, duela o no, una nueva regularización, con reparto incluido, y, duela o no, un cierre migratorio.
El contrato laboral agrario hace tiempo que dejó de funcionar, del mismo modo que los llamados "contratos circulares" son una cantidad mínima: 56 mil personas en tres años.
Hay que decir que en el nuevo empleo creado este año, el 70% ya es inmigrante: debe decirse que dos terceras partes son latinos y el resto europeos. Para entendernos, el efecto de las fórmulas de empleo en el ámbito subsahariano no es muy alentador.
Cierto, y sin duda, España necesita cubrir déficit de población con inmigración, pero los ámbitos donde esa población laboral parece faltar son los servicios y los cualificados, sectores de alta productivodad. Por cierto, empieza a notarse que la llegada de personas cualificadas de la América hispana esta limtando los salarios en el ámbito de las personas cualificadas (ingenierías, arquitectura o finanzas).
Se trata, en suma, no solo de que necesitemos temporeros en algún sector, quizá en parte de la hostelería si la oferta de empleo sigue creciendo, sino que necesitamos de un alto nivel de gasto en educación, salud y vivienda.
Para que se hagan una idea, ustedes puede hacer tantos contratos de temporeros como quieran, pero en Madrid habrá, en diez años, un millón más de habitantes. Dónde les damos de vivir, comer y enseñar es un problemilla. De esto va el debate de la inmigración, no de que los de VOX se enerven.
Este debate ya lo tuvimos hace años. La regularización no trajo especiales problemas, pero teníamos infraestructuras y, entonces, empleo que ofrecer. Más tarde el empleo desapareció cuando la "Champions League" de la economía de Zapatero" se desvaneció.
Hace falta sentarse a hablar del asunto, estimados y estimadas. Poner a un portavoz a insultar al PP no sé si es buena idea, pero queda de cine, asi con "alegria", ustedes me entienden. Lo de recuperar a los temporeros ya les digo yo que hará que vengan, legales e ilegales, pero no trabajarán donde Pedro desea. Es lo que hay.